El chorreado abrasivo es una técnica de limpieza que utiliza material abrasivo. Los abrasivos utilizados varían mucho en sus propiedades, y algunos son productos químicos. A pesar de la composición física y química de los abrasivos, todos funcionan a través del efecto físico. Deben entrar en contacto con la superficie que se limpia para que produzcan un efecto de limpieza. Cuando se necesite de abrasivo Blasting, se debe visitar Los Angeles CA.
Los abrasivos se pueden colocar en muchas categorías según diversos criterios. En un criterio, se clasifican dependiendo de si son naturales o sintéticos. Ejemplos de abrasivos naturales son olivino y calcita. Por otro lado, se fabrican abrasivos sintéticos. La mayoría de los abrasivos fabricados suelen ser subproductos de otros procesos. Por ejemplo, el silicato de calcio es un subproducto de la fabricación de acero. El silicato de calcio también puede ser un producto de vidrio reciclado.
También es posible encontrar productos que se fabrican exclusivamente para servir como abrasivos. Por mucho que existan estos tipos de abrasivos, están detrás para encontrarlos teniendo en cuenta su pequeño número. La gran cantidad asociada de trabajo involucrada en la producción de abrasivos explica su existencia en pequeñas cantidades. Por no mencionar el trabajo de carga involucrado en la refinería de abrasivos.
Debido a que los abrasivos fabricados que se destinan deliberadamente para el trabajo de limpieza son difíciles de conseguir, las empresas suelen optar por reciclar los que tienen. El reciclaje se realiza a través de varios métodos, como la recuperación magnética y la centrífuga. El método de recuperación y reciclaje generalmente depende del tipo de material abrasivo considerado. Además, la recuperación de los materiales depende de si se usan húmedos o secos y de la frecuencia de uso.
Por lo general, es difícil reciclar o recuperar abrasivos en aplicaciones de mampostería. La razón detrás de esto es porque los abrasivos se utilizan en forma húmeda. Además, los abrasivos utilizados en esta situación generalmente tienden a ser bastante suaves. Esto significa que con cada uso posterior se descomponen aún más. Como tal, recuperarlos del sitio para fines de reciclaje es imposible. Normalmente, solo se recuperan para su eliminación una vez que el trabajo está terminado.
Se pueden usar muchos criterios para la clasificación de abrasivos. Algunos de estos factores incluyen la solubilidad, la absorbencia, la forma, la densidad, el tamaño, la dureza y la temperatura. Tradicionalmente, los tamices de laboratorio se han utilizado para la distribución del tamaño de partícula. Sin embargo, eso ha cambiado como resultado de una mejor tecnología que se está inventando. Hoy en día, la distribución del tamaño de partícula se realiza mediante difracción láser. Cualquier abrasivo que se considere bueno debe tener un tamaño de partícula estrecho.
Se prefieren abrasivos de tamaños de partícula más pequeños para tareas y superficies sensibles. Tales superficies requieren abrasivos que tengan diámetros que varían entre 10 y 100 micrones de tamaño, es decir, si todos los otros factores se mantienen constantes. Sin embargo, las aplicaciones a gran escala necesitan tamaños de partícula más grandes. Las partículas deben oscilar entre 80 y 250 micras en el tamaño del diámetro.
Por último, los abrasivos con un tamaño de partícula superior a 250 micras son adecuados para usos industriales. Además de esto, son mejores para usar en procedimientos que involucran la preparación de la superficie. En la preparación de las superficies, los abrasivos ayudan a eliminar todos los desechos externos, creando así una textura adecuada que ayuda a mejorar la adhesión.
Los abrasivos se pueden colocar en muchas categorías según diversos criterios. En un criterio, se clasifican dependiendo de si son naturales o sintéticos. Ejemplos de abrasivos naturales son olivino y calcita. Por otro lado, se fabrican abrasivos sintéticos. La mayoría de los abrasivos fabricados suelen ser subproductos de otros procesos. Por ejemplo, el silicato de calcio es un subproducto de la fabricación de acero. El silicato de calcio también puede ser un producto de vidrio reciclado.
También es posible encontrar productos que se fabrican exclusivamente para servir como abrasivos. Por mucho que existan estos tipos de abrasivos, están detrás para encontrarlos teniendo en cuenta su pequeño número. La gran cantidad asociada de trabajo involucrada en la producción de abrasivos explica su existencia en pequeñas cantidades. Por no mencionar el trabajo de carga involucrado en la refinería de abrasivos.
Debido a que los abrasivos fabricados que se destinan deliberadamente para el trabajo de limpieza son difíciles de conseguir, las empresas suelen optar por reciclar los que tienen. El reciclaje se realiza a través de varios métodos, como la recuperación magnética y la centrífuga. El método de recuperación y reciclaje generalmente depende del tipo de material abrasivo considerado. Además, la recuperación de los materiales depende de si se usan húmedos o secos y de la frecuencia de uso.
Por lo general, es difícil reciclar o recuperar abrasivos en aplicaciones de mampostería. La razón detrás de esto es porque los abrasivos se utilizan en forma húmeda. Además, los abrasivos utilizados en esta situación generalmente tienden a ser bastante suaves. Esto significa que con cada uso posterior se descomponen aún más. Como tal, recuperarlos del sitio para fines de reciclaje es imposible. Normalmente, solo se recuperan para su eliminación una vez que el trabajo está terminado.
Se pueden usar muchos criterios para la clasificación de abrasivos. Algunos de estos factores incluyen la solubilidad, la absorbencia, la forma, la densidad, el tamaño, la dureza y la temperatura. Tradicionalmente, los tamices de laboratorio se han utilizado para la distribución del tamaño de partícula. Sin embargo, eso ha cambiado como resultado de una mejor tecnología que se está inventando. Hoy en día, la distribución del tamaño de partícula se realiza mediante difracción láser. Cualquier abrasivo que se considere bueno debe tener un tamaño de partícula estrecho.
Se prefieren abrasivos de tamaños de partícula más pequeños para tareas y superficies sensibles. Tales superficies requieren abrasivos que tengan diámetros que varían entre 10 y 100 micrones de tamaño, es decir, si todos los otros factores se mantienen constantes. Sin embargo, las aplicaciones a gran escala necesitan tamaños de partícula más grandes. Las partículas deben oscilar entre 80 y 250 micras en el tamaño del diámetro.
Por último, los abrasivos con un tamaño de partícula superior a 250 micras son adecuados para usos industriales. Además de esto, son mejores para usar en procedimientos que involucran la preparación de la superficie. En la preparación de las superficies, los abrasivos ayudan a eliminar todos los desechos externos, creando así una textura adecuada que ayuda a mejorar la adhesión.
Sobre el Autor:
Puede encontrar una descripción general de los beneficios que obtiene cuando utiliza los servicios profesionales de limpieza abrasiva de Los Ángeles CA en http://www.masterpowdercoating.com/blasting-services.html ahora.
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